Como nunca y como siempre
Tigre cayó en Rafaela ante Atlético. Fue por 3 a 0 con goles de César Carignano de penal, de Lucas Bovaglio de Cabeza y de Cristian Machín sobre el final. Guillermo Sara arquero local le desvió un penal a Emanuel Pio en el inicio de la segunda parte. El Matador lleva 9 partidos sin ganar y cortó una seguidilla de cuatro empates.
"Jugamos como nunca, perdimos como siempre" frase vieja, un lugar común que aveces parece se vuelve actual, sobre todo a la hora de explicar, un poco (y solo un poco) la derrota del Matador en Rafaela. El de Victoria fue el que propuso, el que arrinconó aun cayendo 1 a 0 a su rival hasta el ahoga. Pero enfrente estaba Guillermo Sara y pelota tras pelota se fue agrandando, haciendose figura. Se lo tapó a Federico Santander abajo junto al palo, a Diego Ftacla con el pie, a Alejandro Donatti tras un cabezazo, en la segunda parte tapó otro cabezazo esta vez a Santander y en las dos que no llegó la suerte no estuvo ckn la visita. Hablamos de un tiro cruzado de Rubén Botta (de buen partido) que se fue cerca del poste derecha y un zapatazo de media distancia de Pio que dio en el travesaño.
Otra explicación, se encuentra en el cambio que tuvo el partido a los cinco minutos del complemento. Una buena pelota de Diego Castaño buscando a Martín Galmarini dentro del área, el pato llegó antes del arquero que en el envión lo derrumbó. Penal del que se hizo cargo Pio rematando fuerte, algo rumbeado a la izquierda de Sara que levantó su pierna izquierda y desvió la ejecución. La moral se desplomó y creció la Crema, que comenzó a llegar y en las dos primeras, solo en las dos primeras, apareció Javier García para ahogar por un rato los gritos del celeste.
Con todo esto podría hablarse, al menos, de un empate, sin embargo hay que hablar de los errores de los de Victoria. Fueron dos los más claros, los dos puñales. Primero una mano que se piensa entre un acto reflejo y una tontería de Castaño que César Cargnano cambió por gol en cinco minutos de juego. La otra es pro acumulación. Una inexplicable falta de Mariano Echeverría cerca del área en una de los tanto mano a mano que perdió, acto seguido vino un centro de esos que le duelen a los del Vasco Arruabarrena; cruzado al segundo palo. Lucas Orban miraba a su marca pero con el balón en el aire se dio vuelta para mirarlo y lo perdió a Carrera que le sirivó de cortina a Lucas Bovaglio, perdido por Echeverría, para que el capitán cabecee y con una floja reacción de Garcia convertir el segundo. Ya el tercero fue obvio y también cae en un lugar común "corner mal ejecudato gol del rival" así salió la contra que fue de derecha a izquierda del ataca local y Cristian Machin definió mano a mano.
"No voy a hipotecar el club, las decisiones las tomaré a la vuelta (de Quito)", dijo el Técnico que si trae un buen resultado en el partido de Copa tendrá aire solo hasta el domingo, donde si o si tiene que sumar los tres puntos con Newell's, para no caer en otro lugar común: "Mandan los resultados".
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